Asambleístas de 13 provincias se autoconvocaron el último 1º de Marzo para manifestarse contrarios al proyecto de explotación Minera a Cielo Abierto. Se establece así una confluencia de voluntades pacíficas que debería ser motivo mas que suficiente para que el Gobierno Nacional y los Gobiernos Provinciales reflexionen acerca de cuáles son, en estas instancias, los caminos a seguir si es que "la profundización de la democracia" significa verdaderamente respeto a la voluntad popular y a su soberanía y no un mero slogan o, lo que es peor, una maniobra electoralista de acopio de votos y de cooptación popular.
Mucho más aún teniendo en cuenta que la expresión de la gente en las calles se realiza, (véase 10.000 manifestantes antiminería) y va creciendo día a día, a pesar de los hechos de violenta represión ejercidos en contra de los manifestantes, antes y durante la vigencia de la Ley Antiterrorista, (véase represión en Catamarca) a la que se le suma la campaña de desprestigio organizada por la propia Presidenta y por Gobernadores Mineros y sostenida por algunos medios de comunicación con la cual se intenta, infructuosamente, emparentar a los asambleístas con posiciones "fundamentalistas", "vetustas" y "sectarias".
Agréganse asimismo las presiones y bloqueos a los medios de Comunicación Alternativos identificados con los Asambleístas y sus reclamos e incluso la extorsiva reticencia en la entrega de fondos públicos para municipios cuyos intendentes son contrarios al proyecto minería a cielo abierto, tal como sucedió en La Rioja.
Agréganse asimismo las presiones y bloqueos a los medios de Comunicación Alternativos identificados con los Asambleístas y sus reclamos e incluso la extorsiva reticencia en la entrega de fondos públicos para municipios cuyos intendentes son contrarios al proyecto minería a cielo abierto, tal como sucedió en La Rioja.
Con todo esto se consolida y es muy clara y por completo legible la señal que se emite desde los pobladores de las provincias mineras (véase conflictos mineros de Norte a Sur). , y que va arraigando en todo el país.
Ella consiste en la negativa conciente y firme a brindar licencia social a los proyectos mineros mientras se mantenga el perfil extractivista que aplica tecnologías que comprometen la seguridad ambiental, la salud de las poblaciones y el patrimonio económico del conjunto en favor de intereses de las Corporaciones Internacionales Mineras que vienen utilizando al poder político, a la Justicia y a las Fuerzas de Seguridad en Argentina para imponer una forma de explotación minera que ha sido rechazada en diversos países del mundo, incluso en aquellos, como Canadá, del cual es originaria la empresa Osisko Mining, pretendida concesionaria en el Cerro Famatina.
Negativa popular reforzada por los numerosos informes de Universidades Nacionales (Córdoba Dr. Montenegro) y Centros Científicos ( Cianuro, Biología y Minería) en relación a los costos y beneficios de la minería a cielo abierto y corroborada por los resultados medioambientales y sociales estadísticos expresados desde el propio Estado Nacional y desde los Estado Provinciales y que dan cuenta que al cabo, de todos los años de explotación minera en las provincias del N.O.A. las condiciones de vida de sus pobladores continúa deteriorándose, al tiempo que avanza la contaminación de aguas y suelos. Es ésta precisamente la piedra angular de la protesta social sostenida en el tiempo por los Asambleístas y es ésta la misma la razón que hace insustentable un proyecto extractivista minero tal como se pretende imponer.
Políticamente, en el contexto de un pretendido y supuesto Gobierno Nacional y Popular, es absolutamente descabellado y contradictorio oficiar de palanca impulsora de un modelo de "desarrollo con inclusión Social" mientras se implementan medidas que buscan concentrar el poder político y económico de los aliados de las corporaciones mineras internacionales (OFEMI) y garantizando a esos mismos poderes la facultad de reprimir si continúa la negativa a brindar licencia social contra la voluntad popular, en vez de, respetando la forma Asamblearia, Plural y Horizontal de organización de la protesta, opuesta a la formación de "concensos" y, en ese marco y con la participación directa del pueblo, bajarse de los autoritarismos y llevar adelante desde el poder proyectos verdaderamente inclusivos, es decir, con la debida licencia social.
Económicamente es "pan de hoy y hambre de mañana" un modelo de crecimiento económico sustentado en el arrendamiento "barato" del territorio Argentino a Corporaciones Mineras Internacionales para que con su propia tecnología y su método de extracción vertiginosa obtengan formidables ganancias contra la voluntad popular generando irreversibles desequilibrios medioambientales que, a diferencia de lo que se trasmite desde los discursos oficiales, no se trata solamente de flora y fauna, sino también de todas las consecuencias degradativas para nuestras poblaciones expresadas en el plano sociocultural y que se vienen manifestando desde hace mas de 500 años
Se ha llegado, entonces, al punto donde el camino se bifurca. O se sigue la dirección de la voluntad popular expresada en todo este tiempo elevando al primer plano al Pueblo con su intuición y su conocimiento de la adversa realidad presente y futura ocasionada por la megaminería contaminante o se reafirma, una vez más, la sumisión política a los intereses económicos que históricamente nos han devastado. Como quiera que sea, la gente ya se ha expresado y seguirá haciéndolo en un único sentido: No habrá licencia para matar en Argentina.
Políticamente, en el contexto de un pretendido y supuesto Gobierno Nacional y Popular, es absolutamente descabellado y contradictorio oficiar de palanca impulsora de un modelo de "desarrollo con inclusión Social" mientras se implementan medidas que buscan concentrar el poder político y económico de los aliados de las corporaciones mineras internacionales (OFEMI) y garantizando a esos mismos poderes la facultad de reprimir si continúa la negativa a brindar licencia social contra la voluntad popular, en vez de, respetando la forma Asamblearia, Plural y Horizontal de organización de la protesta, opuesta a la formación de "concensos" y, en ese marco y con la participación directa del pueblo, bajarse de los autoritarismos y llevar adelante desde el poder proyectos verdaderamente inclusivos, es decir, con la debida licencia social.
Económicamente es "pan de hoy y hambre de mañana" un modelo de crecimiento económico sustentado en el arrendamiento "barato" del territorio Argentino a Corporaciones Mineras Internacionales para que con su propia tecnología y su método de extracción vertiginosa obtengan formidables ganancias contra la voluntad popular generando irreversibles desequilibrios medioambientales que, a diferencia de lo que se trasmite desde los discursos oficiales, no se trata solamente de flora y fauna, sino también de todas las consecuencias degradativas para nuestras poblaciones expresadas en el plano sociocultural y que se vienen manifestando desde hace mas de 500 años
Se ha llegado, entonces, al punto donde el camino se bifurca. O se sigue la dirección de la voluntad popular expresada en todo este tiempo elevando al primer plano al Pueblo con su intuición y su conocimiento de la adversa realidad presente y futura ocasionada por la megaminería contaminante o se reafirma, una vez más, la sumisión política a los intereses económicos que históricamente nos han devastado. Como quiera que sea, la gente ya se ha expresado y seguirá haciéndolo en un único sentido: No habrá licencia para matar en Argentina.
Gustavo Ronsino
Comunicación Popular Autónoma
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